sábado, 16 de mayo de 2020

¿Cómo estás?

"20 de abril del 90
Hola chata, ¿cómo estás?
¿Te sorprende que te escriba?
Tanto tiempo es normal”



Es una pregunta muy sencilla, en apariencia muy común. Seguramente crees que se la haces a varias personas cada día, así como tu la recibes a diario: "¿Cómo estás?".

Ahora intenta vaciar la mente de lo que parece obvio y para a pensar despacio. ¿Cuándo ha sido la última vez que alguien te lo ha preguntado? Y tu, ¿a quién fue la última persona a la que se lo preguntaste y cuánto hace de ello? 
No valen los "cómo estás" que surjan después de desgracias recientes tipo fallecimientos o acontecimientos similares. Ahora además, tienes que cuestionarte cuando ha sido la última vez de verdad, es decir, cuando te lo han preguntado queriéndolo saber, interesándose por ti. Preocupándose. No valen los "cómo estás" que son saludo. Supongo que la cosa se va complicando. Última cuestión: ¿Quién fue la persona que te lo preguntó?
Creo que ya hemos llegado al punto que quería. Es una pregunta tan inusual que cuando te la hacen te deja desconcertado. Es una pregunta que bien hecha puede  derrumbar barreras. Es una pregunta humana y personal y como tal rara. No es tan fácil oírla.
Supongo que ésto nos pasa a todos, pero cuando tienes pareja, y especialmente cuando tienes hijos, los últimos "cómo estás" que quedaban pasan a convertirse en "cómo están los niños" o en "cómo está...(inserte aquí el nombre de su pareja)".
Es difícil explicar bien lo solo que se puede llegar a sentir uno. Lo despersonalizado. Es una gota malaya que te va desgastandoo poco a poco. Al principio no molesta, pero día a día te va afectando. Ya no eres tú, eres el marido o el hijo de, especialmente eres el padre de. Es como si dejaras de ser individuo y pasaras a formar parte de un todo.

Solo en medio de la gente

No sé si alguno habéis visto Mad men. Para los que no, es una serie ambientada en el mundo de las agencias de publicidad americanas en los años 60, pero es básicamente un retrato de la sociedad de su época. Su protagonista es el carismático Don Draper, casado y con 3 hijos, un hombre duro y frío en apariencia, tremendamente exitoso en lo laboral y aún más exitoso con las mujeres. En la tercera temporada está atravesando un pequeño bache personal y en un momento dado, la amante de turno le llama por teléfono y le pregunta: "¿Tú cómo estás?". Don se derrumba y contesta: "eres la única persona que me pregunta por cómo estoy".

¿Por qué cuesta tanto?
¿Es que acaso no queremos saber cómo está la persona de enfrente? Claro que queremos. A veces simplemente no tenemos el suficiente tiempo para hablar, o no hacemos nada para sacarlo. O puede que, simplemente, te separe tanto de las personas que te rodean que éstas se han convertido en una meras compañeras de viaje. 
¿O puede ser que demos por supuesto que todo marcha bien? Cómo va a marchar siempre todo bien si sabemos perfectamente que eso nunca es así completamente. Lo solemos ver en los demás, pero no preguntamos por miedo a  meternos en la intimidad del otro. Sin embargo, hasta el más taciturno y tímido de nosotros necesita desahogarse de vez en cuando. 
Y cuando lo preguntas, ¿Te muestras empático o comprensivo? ¿O solo juzgas a los demás? "Nada, eso son tonterías, cómo te va a preocupar eso, cómo te vas a sentir mal por esa tontería” Pareciera que no nos esté permitido estar mínimamente tristes o descontentos. Siempre fuertes, siempre para adelante. Salvo cuando hablamos de trabajo, claro, que ahí siempre estará todo mal.

Homer solo y trsite. Todo está en los Simpsons.

¿Con cuántas personas puedes contestar  con sinceridad a ésta pregunta, extendiéndote y explicando todo lo que haga falta si es necesario? ¿Con cuánta gente tenemos esa confianza? ¿El problema es de los demás o es tuyo? ¿A qué tenemos miedo? ¿A sentirnos débiles, indefensos? ¿A la incomprensión? ¿A ser vulnerables?  

Seguimos teniendo el tabú. Seguimos teniendo miedo a abrirnos y a que se nos abran, tenemos miedo a escuchar y a compartir. Tenemos miedo a ser débiles, frágiles, a dudar. 
Mira a tu alrededor, observa. Piensa en los que te importan y en cuanto hace que no hablas con ellos sinceramente. Piensa en ti y en cuanto necesitas hacerlo de vez en cuando.

"Eres la única persona que me pregunta por como estoy”. Don Draper, Mad men. 



A veces me siento como Don Draper. Luego veo su foto y se me pasa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario